Protección radiológica: nuevas normas “la responsabilidad para el empleador”

La reglamentación sobre protección radiológica está evolucionando. Los decretos de enmienda de la directiva europea 2013/59 Euratom se publicaron en el Boletín Oficial el pasado 4 de junio de 2018. Refuerza la cohesión y la eficacia de los equipos a todos sus niveles, ofreciendo un enfoque gradual que se adapta mejor a las numerosas situaciones en que las personas o el medio ambiente están expuestos a la radiación ionizante. Se reitera que el empleador continua siendo el responsable de la protección de los trabajadores contra todos los riesgos laborales.

Un enfoque gradual con competencias mejor definidas

Los decretos de reforma de la reglamentación de protección radiológica (n° 2018-434 del 4 de junio de 2018 y n°2018-437 del 4 de junio de 2018) se publicaron en el boletín oficial con la finalidad de mejorar la eficacia de la prevención en materia de protección radiológica.

En el caso de la administración hospitalaria, la dirección, el empleador o incluso el explotador, su objetivo es integrar mejor el riesgo de radiación a un enfoque general de prevención, para optimizar los medios utilizados en materia de protección radiológica. Si bien el cumplimiento estricto de la normativa es obligatorio (incluyendo la organización del trabajo, la evaluación de riesgos, el análisis de los puestos de trabajo y la determinación de áreas en los locales con respecto al riesgo de radiaciones ionizantes), no es un fin en sí mismo.

Lo que realmente cuenta, es el control de los riesgos y el enfoque sistemático para lograrlo, fundamentado en una optimización continua. Lo que viene a ratificar el nuevo artículo R4451-5 del Código del Trabajo que estipula : el empleador asume las medidas de prevención destinadas a suprimir o reducir a su mínima expresión los riesgos resultantes de la exposición a las radiaciones ionizantes, fundamentado en los avances técnicos y la disponibilidad de medios para controlar el riesgo desde su origen. Debe hacerlo con la asistencia y la competencia de la Persona Competente en Protección Radiológica (PCR) que se designa, a partir de ahora como Asesor de Protección Radiológica (APR).

También se exige al empleador que proporcione a los empleados los medios de protección radiológica individuales y colectivos y como también los medios de vigilancia dosimétrica. Sigue siendo responsable de la protección de los trabajadores contra los riesgos laborales y tiene hasta el 1^ero de julio de 2021, para implementar una nueva organización de protección radiológica de conformidad con las nuevas disposiciones del Código del Trabajo, con la asistencia del asesor de protección radiológica.

Dos principios intangibles implementados por el empleador y el equipo implicado

Más allá de la autorización y la declaración de la ASN para un equipo emisor de radiaciones ionizantes, los dos principios rectores de la protección radiológica que se aplican en el ámbito médico son : la justificación y la optimización.

Cada médico que utiliza la instalación es personalmente responsable de su ejercicio profesional. El protocolo de intercambio entre el médico solicitante y el médico a cargo del procedimiento validará y justificará la intervención. Posteriormente, habrá que reforzar la relación del médico laboral con el APR, en particular si le concede el derecho de acceso a la dosimetría que registra la exposición interna del trabajador.

En el campo de la optimización entran en juego otros profesionales como los físicos médicos y los radiofarmacéuticos. La primera tarea del APR es revisar la determinación de las áreas de trabajo y los estudios individuales para la clasificación de los trabajadores, según los nuevos requisitos del código laboral. Él participa en la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores, siempre bajo la responsabilidad del empleador, como lo destaca el Código del Trabajo. Por lo tanto, los empleadores deben estar particularmente atentos: La designación de un asesor de protección radiológica no les exime de responsabilidad penal en caso de falta personal.

Al mismo tiempo, este último no se beneficia de inmunidad en caso de incumplimiento de su deber, lo que puede dar lugar a la revocación de la designación o a la aplicación de sanciones disciplinarias en caso de incumplimiento de las prescripciones reglamentarias.

Además, el Comité Social y Económico(CSE), antes el CHSCT, tendrá que ser consultado sobre la nueva organización de protección radiológica que se instaurará, él dará seguimiento : a la designación del APR, la lista de trabajadores clasificados, la lista de las personas con acceso a un área restringida, pero que no necesitan ser clasificados, los medios previstos para la protección colectiva de los trabajadores, como también la vigilancia radiológica del ambiente o la nueva definición de áreas, el equipo de protección personal puesto a disposición de los trabajadores, etc.

Por lo tanto, la protección radiológica es un asunto que incumbe a todos los profesionales involucrados bajo la autoridad y la responsabilidad del empleador y afecta a más de 372.262 trabajadores expuestos a las radiaciones ionizantes, principalmente en los sectores médico, industrial y de la investigación.